Cómo cumplir tus propósitos de año nuevo

Cómo cumplir tus propósitos de año nuevo

Cada año, enero es un buen momento para reflexionar y meditar sobre el año que está empezando. Ahora es el momento de hacer balance y preguntarnos qué queremos seguir haciendo, qué queremos mejorar o por el contrario qué queremos dejar atrás. Estos son los comúnmente llamados propósitos de año nuevo: dejar de fumar, leer más, hacer más ejercicio, tomar suplementos dietéticos, hidratarse más, etc.

Todos tenemos propósitos más o menos buenos a principios de enero, pero ¿es fácil cumplirlos a lo largo del año? En este artículo veremos cómo implementar los propósitos para que sean fáciles de mantener durante todo el año sin perder la motivación.

Elige tus propósitos

La clave principal para poder mantener tus propósitos durante todo el año es elegir los que sean importantes para ti. No elijas ser vegetariano porque está de moda, hazte las preguntas correctas. ¿Por qué eliges ser vegetariano? ¿Qué significa esto para ti? Lo mismo si quieres empezar a hacer deporte: ¿Por qué lo haces? Cuáles son tus motivaciones?

No seas demasiado duro contigo mismo y comienza con propósitos realistas. ¿Quieres tener un estilo de vida más activo? Comienza subiendo las escaleras en lugar de usar el ascensor, camina 20-30 minutos al día, comienza de manera progresiva si no estás acostumbrado.

La clave para no perder la motivación es tener la capacidad de medir tu progreso, anotar todas tus pequeñas ganancias en un cuaderno. Algunos cambios son lentos y pueden no aparecer de inmediato, lo que puede hacer que pierdas la motivación. No dudes en revisar tus comienzos de vez en cuando para ver cual está siendo tú progreso

Hazte un horario

No dudes en crear un plan a largo plazo para saber hacia dónde te diriges. Es mucho más fácil alcanzar tus metas cuando los pasos se dan uno tras otro. Divide tus metas en pequeños objetivos para cada mes o semana.

Estudios recientes han demostrado que se necesitan entre 21 y 66 días para que una rutina se convierta en un hábito. Esto hace que sea más fácil incorporar cosas nuevas todos los días en lugar de cambiar todo de la noche a la mañana. Tienes que aprender a caminar primero si quieres correr.

Comparte tus propósitos con tus seres queridos

Informa a los que te rodean sobre los cambios que te has propuesto. Al compartir tus objetivos seguramente encontrarás un socio motivado para acompañarte. Con objetivos comunes, podréis acompañaros en el proceso, ¡juntos somos más fuertes!

Logra siempre lo mejor de ti y procura no compararte con los demás. Ve a tu propio ritmo, la tortuga no puede ir a la misma velocidad que la liebre, pero sí puede legar más lejos.