¿Es la cosmética natural la solución para una piel perfecta?

¿Es la cosmética natural la solución para una piel perfecta?

¿Cosmética natural o sintética? La eterna pregunta que nos hacemos cuando queremos comprar productos para la piel. Descubre las diferencias.

Para entender cuál es la polémica que existe entre ingredientes naturales o sintéticos primero debemos entender qué es la piel, así podremos comprender porque algunas sustancias pueden resultar peligrosas. Una vez entendamos las propiedades que tiene nuestra piel sabremos cómo debemos elegir los productos cosméticos que mejor se adapten a ella.

La piel

La piel es la cáscara que recubre nuestros órganos, es capaz de auto regenerarse después de sufrir daños, además es absorbente, lo cual permite que se introduzcan sustancias a través de ella, está es una de las razones más importantes por las que debemos evitar el contacto con ciertos productos tóxicos. Además de estas dos propiedades tiene otras que la convierten en indispensable, veamos de que se trata:

  • Nos protege de los rayos solares
  • Nos protege de la deshidratación
  • Es elástica
  • Regula nuestros cambios de temperatura
  • Sintetiza la vitamina D indispensable para el calcio
  • Nos brinda la capacidad del tacto
  • A través del dolor nos avisa de que algo va mal, por ejemplo un golpe

 

Cosméticos naturales o sintéticos

Lo cierto es que no es fácil encontrar el producto perfecto, especialmente con la cantidad de productos con los que nos bombardean prometiendo milagros para que compremos, a no ser que sepamos qué es lo que debemos buscar según nuestra necesidad, o que es lo que debemos evitar y como detectarlo. Dicen que saber es poder, por eso os vamos a dejar información sobre algunas sustancias que debemos evitar y otras que son totalmente inocuas, independientemente de si son naturales o sintéticas.

 

La palabra natural no es sinónimo de mejor

En muchos casos nos avasallarán con la palabra '‘natural’' como estrategia de marketing pero, hemos de tener en cuenta que natural no es sinónimo de seguro o mejor.
Pongamos un ejemplo práctico, muchas sustancias naturales son a la vez peligrosas, podríamos vender un producto con la palabra natural y no estaríamos mintiendo si estuviéramos hablando del cianuro, un potente veneno que todos conocemos.


Pero vamos a adentrarnos un poco mejor en el tema, para que sepamos mejor que es lo que quiero decir con que natural no es sinónimo de seguro, pensemos en esas personas que sufren una reacción alérgica a una fruta, ¿verdad que nadie se asusta cuando se toma un antiestamínico, principalmente fabricado en un laboratorio a base de químicos? La palabra químico está mal interpretada, tendemos a asociarla con un elemento tóxico o perjudicial, pero todo nuestro planeta es pura química; el agua que bebemos, el aire que respiramos, los minerales… y un sinfín de cosas en las que no nos paramos a pensar. Pero si seguimos ahondando en la naturaleza veremos qué natural no es lo mismo que seguro, existen muchos compuestos naturales que son dañinos, petróleo, venenos, y un gran etc…

 

Qué debemos tener en cuenta a la hora de elegir

Lo que debemos preguntarnos es que tipo de ingredientes lleva el producto, normalmente los últimos ingredientes de la lista son los polémicos ya que se trata de los conservantes que se utilizan, la lista se ordena de mayor a menor según la cantidad y como de conservantes se pone poca cantidad ya sabemos dónde mirar.


Tampoco debemos asustarnos por el tipo de nombre del ingrediente, se utilizan los nombres químicos siempre, por lo tanto que veamos un nombre raro no significa que sea un ingrediente tóxico, por ejemplo el nombre del azúcar común es alfa-D-Glucopiranosil.


Ahora que sabemos un poco más sobre los químicos vamos a dejaros algunos consejos de cuales deberíamos evitar:

  • Los derivados del petróleo ya que no está todavía claro cómo puede afectar su uso,
  • Los parabenos afectan al sistema endocrino así que es mejor evitarlos.
  • Los que lleven cloro o bromo, no confundir con chloride ya que este último si es seguro
  • Casi todos los jabones contienen Sodium laureth sulphate que es mejor evitar, pero no hay que confundirlo con sodium lauryl que es seguro. En el jabón infantil se suele sustituir por cocoglucosides que es una mezcla sintética de jabón y azúcar.
  • Evitar el triclosan, peligroso para la salud y medioambiente
  • Evitar la palabra aluminium en desodorantes y transpirantes, incluida la piedra de alumbre ya que también lo contiene.
  • Evitar el formaldehído, es cancerígeno

Existen un sinfín de químicos a evitar pero os hemos nombrado los más comunes. Por otro lado, muchos cosméticos tradicionales llevan compuestos sintéticos y son absolutamente seguros para nuestra salud. Del mismo modo que otras sustancias naturales pueden producir reacciones alérgicas. Si decides buscar cosméticos naturales deberás tener en cuenta estos consejos; mira siempre la etiqueta y en particular estos ingredientes:

La presencia de ingredientes activos naturales, como por ejemplo aceites esenciales, extractos de plantas, flores y frutas. Busca siempre que no lleven derivados del petróleo, que estén basados en aceites vegetales como el de oliva o coco. Aditivos de origen natural: el ácido cítrico o el benzoico, la glicerina y fragancias naturales extraídas de aceites esenciales.

Productos alternativos

Igual que existen productos fabricados en laboratorio, también podemos encontrar productos que son directamente naturales y cumplen la misma función. En el caso de los limpiadores faciales para eliminar el maquillaje, podemos encontrar alternativas muy económicas a la par que naturales y seguras. Los aceites base, son perfectos para limpiar la piel de un modo suave y respetuoso, no solo limpian sino que nutren e hidratan al mismo tiempo. Entre ellos se encuentran el aceite de jojoba, el aceite de almendras dulces, el de oliva y el de ricino.


La forma de uso es muy sencilla, humedece un algodón con un poco de aceite y retira los restos de maquillaje como harías con un limpiador normal, además después no tendrás que aplicar ninguna crema hidratante. También podemos realizar otro limpiador de rostro un poco más elaborado, haz una infusión de manzanilla concentrada, añade una cucharada de aceite de oliva y mezcla bien, si tienes la piel grasa añádele el zumo de medio limón.


También se pueden preparar mascarillas para nutrir como la del yogurt, pon unas gotas de aceite de almendras dulces en un yogurt natural, remuévelo bien y aplícalo sobre el rostro y el escote unos 15 minutos, es ideal para suavizar la piel.
 

En resumen, lo importante no es si los productos son de origen natural o sintético, lo importante es que no sean dañinos para la piel. Mientras que los cosméticos que utilicemos respeten y cuiden e nuestra piel estaremos eligiendo los adecuados.